Apariencia, autoridad y Kierkegaard (Parte V: Resumen)
Este es un resumen de una serie de posts en los que relacioné los términos de apariencia y autoridad y la filosofía de Kierkegaard.
Por si no queda claro el mensaje, quiero remarcarlo. Con estas entradas he querido decir que en muchas ocasiones se da una autoridad equivocada a una persona o idea. Actualmente se sobrevalora la apariencia; es un prejuicio que hemos interiorizado, y es natural puesto que la belleza atrae por sí sola. Debemos tener en cuenta que la autoridad puede no ser bella, que hay sabios viejos y feos que tienen más razón que la última película cool que hayas visto.
Además, nos dejamos llevar por los demás, por la importancia de algo o alguien o por nuestros sentimientos. Juzgar los conocimientos de alguien o un conocimiento en sí por su apariencia (o por los demás errores señalados) es típico del ser superficial (aunque también es natural); Kierkegaard definió el origen de la superficialidad, describió sus síntomas e ideó un modo de evitarla.
Parte I: ¿Qué es la autoridad? (ver post)
Hay que distinguir autoridad epistemológica (del que sabe) de la deontológica (del que puede).
La autoridad referida al conocimiento (epistemológico) la da la sociedad a una persona porque parece que sabe más en un determinada ámbito que la mayoría. La sociedad otorga autoridad a quien tiene mejor apariencia de saber: nos creemos a aquél que parece que sabe de que habla, no a aquél que no lo parezca aunque tenga más razón.
- ¿Es correcto que alguien tenga autoridad deontológica pero no epistemológica? No, porque es un abuso de poder sin consentimiento
- ¿Es correcto que alguien con autoridad epistemológica tenga también la deontológica? No siempre, puesto que aunque sepa mucho de un ámbito puede que sus conclusiones y actuaciones no sean correctas
Parte II: Apariencia y autoridad (ver post)
Cuanta mejor apariencia, mayor es el reconocimiento de saber que uno recibe. Una web con buen diseño es más creíble que una mal diseñada, aunque digan lo mismo.
La buena apariencia mejora la credibilidad, el respeto (admiración) y la confianza de los demás en alguien/algo. Se tiene mayor consideración hacia una persona con buena apariencia que hacia alguien que vista y huela mal.
Parte III: Errores al otorgar autoridad (ver post)
- Como hemos dicho, a veces nos dejamos guiar por la apariencia. Además, creemos que la apariencia lo indica todo (moralidad, inteligencia, conocimiento…)
- A veces nos dejamos guiar por lo que cree la mayoría
- A veces nos dejamos guiar por personas o entes que consideramos importantes
- A veces nos dejamos llevar por las relaciones y otorgamos autoridad a las personas que queremos y se la restamos a las personas que nos desagradan
Parte IV: Kierkegaard y el esteta vital (ver post)
Kierkegaard planteó lo siguiente:
- Alguien se aburre
- El aburrimiento crea Decepción y vacío interior -> a la mayoría de la sociedad les ocurre, y les llama Estetas Vitales porque se queda en un estado estético de la vida (son superficiales)
- La decepción crea Dolor
- El dolor es buscado, ignorado, dotado de sentido o evitado
- Lo más común es tratar de evitar el dolor. Se consigue por 2 vías: el terror y la diversión
Además, Kierkegaard señaló que el Esteta Vital suele sufrir otras consecuencias: anormalidad (alaba todo aquello fuera de lo común), chismorreos (puesto que su vida no es interesante, se fija en la de otros), sentimentalismo (la única medida de la realidad para el superficial son los sentimientos) y prisas (porque quiere bienes inmediatos).
Algunas maneras de evitar la superficialidad son: procurar observar objetivamente, equilibrar razón e irracionalidad, dialogar y aceptar las carencias de uno mismo.
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