Chaos in UCLA: Sam gets fired

Aviso: esta entrada contiene tanto datos verdaderos como falsos. Además hay muchas metáforas y juegos de palabras. Adivina cuál es la realidad, o no si lo prefieres.

Hoy nos hemos despertado envueltos de sangre por todos lados. Nuestra habitación estaba llena de buitres y peces como siempre, y nuestra impresión ha sido que la sangre se había originado debido a las picabarallas de los buitres entre sí.

Por si fuera poco, el cielo estaba lleno de lo que parecían murciélagos enormes, todos tirándose de cabeza, chillando y dando vueltas a UCLA. El pánico ya había sido generalizado por la mañana, lo que ha llevado a la locura. Los cocineros han dejado de cocinar, los profesores han dejado de dar clases, los alumnos han dejado de hacer campanas, los peces ya no evitaban ser pescados…

Al intentar comer el desayuno no hemos podido llevar a cabo tal acción debido a la strike de los cocineros. Estos se llaman protestors, en inglés. A pesar de los altercados inhumanos matinales hemos ido a clase. En clase el profesor ha aparecido con una camiseta rosa y una chancletas fosforecentes y cantando “Singin in the rain”. Cool! Pero a media clase el profesor (Mr. Randall) ha salido volando por la ventana cuál avión de Waterworld, y no lo hemos vuelto a ver.

Our room at UCLA

Fuera, en los pasillos, había muchos estudiantes también manifestándose, pero cada uno se manifestaba por una razón diferente. Uno llevaba pancartas en contra del sida, uno iba en contra de las drogas, otro iba a favor de la destrucción del mundo con armas nucleares, otro a favor del sida… Todos chillaban también, como los murciélagos, intentando atraer público a sus pancartas. Algunos hacían el amor, otros se tatuaban en las escaleras de camino a clase. Los tatuajes aquí son muy normales, y el sexo y las drogas también.

Ante tal caos hemos decidido caotizarnos. Los alumnos del summercamp hemos empezado una huelga general en UCLA, hemos preparado unas barricadas con mesas de los comedores y camas de las habitaciones de nuestra residencia y los hemos incendiado en la plaza central de UCLA mientras sonaba de fondo y a todo volumen [Sum 41 – Underclass Hero] y cheerleaders con poca ropa bailaban alrededor de la hoguera.

Nuria & Pol on the beginning of the Strike

UCLA Students in chaos

Esta paranoia acabó con una explosión cuál final de temporada de Perdidos. El cielo se volvió naranja y el fuego reinaba en el ambiente. Un Elvis Presley gigante apareció volando por encima de las llamas y bailó el Chiki-Chiki mientras todos los habitantes de UCLA, Westwood y Santa Monica entera lo loaban y alababan arrodillados. Entonces Otto explicó su filosofía de vida:

Lo que había empezado con simple sangre, se fue conviertiendo en un auténtico infierno terrenal. Los agentes de seguridad del campus ya no controlaban sus actos y ponían fines a los bebedores de agua y respiradores de oxígeno. Las cañerías o bocas de bomberos explotaban y salía agua por todas partes cuál Steamboat Geyser in Yellowstone Park. El humo de los hookahs nublaba la vista de cualquiera, incluídos los mejores oteadores como Agustain. Después cayó un meteorito a la cabeza de Pol, y el pelo de este quedó de color amarillo.

Pol después del impacto del meteorito

El Señor Armenio Musculoso (también conocido por sus iniciales, Sam) fue despedido por los agentes de seguridad del campus por haber organizado una fiesta en medio de ese caos, pues había roto toda regla por haber del campus, del estado y del país. Sam respondió a ello con un “I’m already fired, what else can they do to me?! Fire me again?”, que viene a decir que como ya estaba expulsado haría lo que quisiera porque ya nadie le ponía límites.

Así que Sam cogió botellas de alcohol y las bebió en medio del campus. Como ya está expulsado, puedo poner el vídeo como muestra de su culpabilidad:

Sam drunk

Después fuimos a fumar hookah, otra vez. En el Haibibi Cafe camareros egipcios y marroquíes reían y saltaban a la pata coja en la que era la fiesta del flamenco. Allí también conocimos a una chica alemana y otra de Barcelona, y otra y otra más. También estuvimos con francesas y después volvimos a las habitaciones a reservar el hotel para Las Vegas (ya que de reservar la furgoneta se encargó POL, que quede claro, que aquí hay mucho que se queja pero en el momento de la verdad…).

Girls smoking

Justo antes de dormir pasó algo increíble de verdad. Pero no puede ser escrito, a pesar de lo que me gustaría, pues todo tiene un límite. Esa es una de esas historias que ya contaré cuando vuelve, pues explicar intimidade por aquí podría ser más que perjudicial para algunos (o beneficioso, quién sabe).

Eugene, nuestro armenio RA, uno de los encargados de organizar nuestro viaje a Las Vegas.

Sin duda, estamos en buenas manos. No hay nada que temer.

Comments
  1. leclerqz | Reply
  2. isabel | Reply
  3. Julieta | Reply
  4. AS | Reply
  5. Julieta | Reply
  6. Tito | Reply
  7. Tim-Tim | Reply

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